Un papiro de 2.700 años de antigüedad lleva la mención más antigua conocida de Jerusalén en hebreo. Se trata de un raro y antiguo papiro que data del Período del Primer Templo.
El frágil documento, que se cree que fue saqueado de una cueva del desierto de Judea, fue adquirido por la Autoridad de Antigüedades de Israel (IAA) en 2012 cuando los ladrones intentaron venderla a un distribuidor.
El trozo de papiro, cuyo contenido fue oficialmente anunciado por la IAA este pasado miércoles, mide 11 por 2,5 centímetros.
Amir Ganor, jefe de la división de prevención de robo de antigüedades de la IAA, dijo que el papiro provenía de una cueva en Nahal Hever, en el desierto de Judea. La ubicación árida y fresca cerca del Mar Muerto permitió la preservación del fragmento durante casi tres milenios.
La datación por radiocarbono ha determinado que es del siglo VII aC, convirtiéndolo en uno de los tres únicos papiros hebreos de ese período, varios siglos más antiguos que los Rollos del Mar Muerto.
Aunque existen varios textos hebreos grabados en piedra y garabateados en pedazos de cerámica de este período, los hasta ahora dos únicos textos conocidos de un papiro hebreo de antes de la caída del Reino de Judea eran el papiro Marzeah -datado entre mediados y finales del siglo VII aC- y un palimpsesto de papiro encontrado en Qumran.
DATACIÓN CONFIRMADA
Eitan Klein, de la IAA, ha explicado que esta datación del papiro ha sido confirmada comparando el tipo la ortografía del texto con otros textos de la época.
Sus dos líneas de escritura negra paleo-hebrea parecen haber sido una nota de despacho registrando la entrega de dos odres destinados «a Jerusalén», la capital del Reino de Judea.
El texto completo de la inscripción dice: «De la sierva del rey, de Naharata (lugar cerca de Jericó) dos odres a Jerusalén».
El hecho de que la nota se haya escrito en papiro, en lugar de la habitual ostraca de arcilla más barata, sugiere que el envío de odres podría haber sido enviado a una persona de alto estatus.
En una conferencia de prensa en Jerusalén con funcionarios de la IAA el miércoles, el erudito bíblico Shmuel Ahituv dijo que la mención de una «sirvienta del rey» enviando los odres a «Yerushalem» indica que fue enviado por una mujer prominente a la capital judía. Ahituv estudió el papiro tras su adquisición.
Ahituv también explicó que es significativo que el texto escriba la palabra «Yerushalem» como nombre de la ciudad, que es el que se encuentra más comúnmente en la Biblia. Hay sólo cuatro casos en la Biblia, señaló, en los que Jerusalén se escribe «Yerushalayim», con una letra adicional Yod, la forma en que se pronuncia en el hebreo moderno.
LUCHA CONTRA LOS SAQUEADORES
La Autoridad de Antigüedades de Israel se ha movido para prevenir que los ladrones de antigüedades saqueen el patrimonio arqueológico del país, especialmente en las cuevas de piedra caliza que salpican los acantilados que conducen al Mar Muerto. Esas cavernas han producido dos de las colecciones más significativas de textos antiguos hebreos: los Rollos del Mar Muerto y las cartas de Bar Kochba.
Mientras, los arqueólogos se apresuran para explorar las cuevas restantes de la zona con la esperanza de descubrir nuevos rollos y evidencias científicas del antiguo Israel.