Marcos Zapata es fundador de la Iglesia Evangélica “Buenas Noticias” de Lugo (1989), que pastorea. Es parte de la Junta Directiva del movimiento nacional Buenas Noticias y el actual presidente de la Alianza Evangélica Española, además de conocido conferenciante nacional e internacional.
En España desarrolla varias funciones como miembro de la junta de la Conferencia Nacional de Hombres; formando parte del equipo ministerial de Operación Bernabé; es Consejero nacional de AGLOW. Miembro del Comité de Bioética del Hospital Universitario Lucus Augusti de Lugo, y ha sido director de diversos Centros de Menores.
Se formó en Magisterio en la Universidad de Santiago de Compostela. Es también profesor instructor de técnicas de Terapia Sistémica y profesor titular del INFFA (Instituto de Formación Familiar). Participa activamente en diversas conocidas ONGs de carácter social y misionero.
Nos encontramos con él para hablar de la realidad emergente en la vida social y política de los cristianos evangélicos latinos.
Pregunta.- Participas a menudo en conferencias internacionales ¿Cómo ves la realidad actual de las iglesias evangélicas en la sociedad de América Latina?
Respuesta.- Recuerdo que durante años se ha hablado en círculos académicos de la “resurrección de la religión” en el mundo actual. Fue una comprobación de que las “profecías” seculares de hombres como Marx, Nietzsche, etc, no sólo eran fallidas, sino que la tendencia era totalmente la contraria, la religión se revitalizaba, y dentro de ese movimiento, para sorpresa de todos, llega el avivamiento a las iglesias evangélicas en Latinoamérica, como una verdadera segunda Reforma.
El crecimiento ha sido y está siendo realmente sorprendente y provocador a una sociedad dominada por el catolicismo y que, ni por la imaginación de los mejores diseñadores sociales, podrían vaticinar tal impacto espiritual, social, económico y ahora también político.
P.- ¿Cuáles crees que han sido las posibles causas de este enorme crecimiento?
R.- La explosión numérica vino dada, entre otras cosas por proveer una nueva dignidad individual, nuevas redes de apoyo personal, social y comunitarias, nuevas oportunidades de crecimiento personal y de liderazgo, una fácil traducción de la fe a los tiempos actuales, tanto en su expresión musical como en su enseñanza empoderadora de todos los creyentes, que, sin duda, ha dado un sentido y contenido a la fe cristiana que era desconocida para la mayoría de las personas.
P.- En los medios de comunicación se relaciona a menudo este crecimiento con una pobreza intelectual, teológica y de compromiso social ¿es real o hay una imagen deformada o caricaturizada del creyente evangélico latino?
R.- En el devenir del desarrollo de las iglesias evangélicas, se ha dado un claro crecimiento en madurez, en nuevos cuadros intelectuales, en teólogos de primera línea mundial o en toda clase de profesionales de todos los ámbitos del conocimiento y la empresa.
Los tiempos donde ser evangélico era ser ignorante han quedado atrás. Es todo lo contrario, la “protestantización” ha venido a ser significado de modernidad, de conexión con las sociedades más avanzadas.
La iglesia evangélica latina se ha independizado de las iglesias norteamericanas que enviaron misioneros en los años 30, se ha adaptado a las diversas esferas sociales, dejando atrás usos y costumbres limitantes, y ha pasado de ser una minoría religiosa a tener un cada vez mayor reconocimiento social y ser una alternativa social no rupturista con la sociedad circundante.
P.- Esta nueva situación también puede generar “problemas de crecimiento”, de hecho la presencia en la esfera política y social ha conllevado ataques y críticas a líderes evangélicos, a menudo fuera de toda lógica.
R.- Sin duda también puedo ver este y otros problemas cara al futuro, ya que la sobreexposición de las iglesias y de sus líderes harán que la imagen de los mismos sea puesta a prueba, y sin duda encontraremos casos ciertos o falsos de escándalos, corrupción, promesas políticas no cumplidas, etc. que unido a los siempre presentes prejuicios contra los evangélicos, harán que debamos ser más que esforzados en luchar por una transformación social necesaria, más allá de las transformaciones individuales, en las cuales, los evangélicos, somos tan eficaces.
Pero en cualquier caso todo el mundo debe tener claro que el movimiento evangélico, ha llegado para quedarse y ya no puede ser menospreciado, ni ignorado, debido a su gran impacto social en Latinoamérica.
P.- ¿En qué piensas que el nuevo diario Evangélico Digital puede ayudar a la imagen y labor de esta Latinoamérica evangélica?
R.- Sin duda alguna Evangélico Digital será un factor clave para transmitir la imagen real de los evangélicos latinos.
La iglesia evangélica ha sido, y sigue siendo, pionera en la utilización de multimedia, marketing, internet, artes visuales, moda, estética moderna, música actual, estilos y comportamientos de vanguardia, que rápidamente son incorporados, individual e institucionalmente para potenciar al máximo la divulgación del Evangelio.
Evangélico Digital viene a llenar un espacio propio que aún no se ha ocupado en el ámbito de la comunicación evangélica en Latinoamérica, algo que entiendo que es similar a lo ocurrido en España con Protestante Digital, medio que tan bien conozco y que apoya este nuevo proyecto.
Sé que, con la ayuda de Dios, Evangélico Digital será un instrumento para bendecir a los creyentes, la iglesia y las naciones de América Latina.
Pueden leer noticias breves en la redes sociales de «Evangélico Digital» (facebook y twitter), y si quieren suscribirse a las mismas. El diario saldrá a la luz en el mes de junio.
Fuente: http://protestantedigital.com/sociedad/44802/La_Latinoamerica_evangelica_ya_no_puede_ser_ignorada_dice_Marcos_Zapata