Más de veinte mujeres de la ciudad de Butembo, en el noreste del país, aseguran haber sufrido agresiones sexuales por parte de siete organizaciones, entre ellas la Organización Mundial de la Salud.
Hasta 22 mujeres de la ciudad de Butembo, situada al noreste del territorio de República Democrática del Congo, han asegurado haber sufrido abusos sexuales, y una de ellas afirma haber sido violada, a manos de trabajadores de diferentes ONG internacionales durante la respuesta a la crisis del ébola entre 2018 y 2020, según revela una investigación publicada por el diario digital especializado en cooperación The New Humanitarian y la Fundación Thomson Reuters.
También añaden al número de víctimas a otra mujer que murió mientras intentaba abortar después de quedar embarazada tras haber mantenido relaciones con un empleado de una de la organizaciones que operaban en la ciudad. Estas nuevas acusaciones se suman a las que ya se hicieron públicas en octubre de 2020, en otra investigación también realizada por The New Humanitarian y la Fundación Thomson Reuters, y que revelaron que al menos 50 mujeres habían sufrido agresiones sexuales por parte de trabajadores de diferentes ONG.
Según la investigación, las mujeres eran convocadas por los trabajadores de las organizaciones que han sido acusados, 18 de ellos congoleños de Kinshasa y cuatro extranjeros, en calidad de una entrevista de trabajo, la mayoría de ellas en habitaciones del Hotel Butembo. En el transcurso de la conversación se forzaba a las víctimas a mantener relaciones sexuales si querían obtener el puesto de trabajo. Hasta 27 millones de personas sufren de hambre severa en República Democrática del Congo.
La institución contra la que se han formulado más acusaciones (14) en esta nueva etapa de la investigación es la Organización Mundial de la Salud (OMS). También habla de dos trabajadores de la Organización Internacional para las Migraciones (IOM, por sus siglas en inglés) y dos más del Ministerio de Sanidad congoleño. También se menciona a UNICEF, la organización médica ALIMA, el Comité Internacional de Rescate (IRC, por sus siglas en inglés) y la ONG International Medical Corps.
“Pensaba que iría a hablar de trabajo, como una entrevista”
Tres de las víctimas han asegurado haber quedado embarazadas después de ser agredidas sexualmente por algún trabajador de alguna ONG. Entre ellas la única víctima mortal, y madre de tres hijos, que perdió la vida en 2019 después de ingerir una mezcla para abortar.
Desde febrero de 2019, los trabajadores de la OMS pasaron a alojarse en el Hotel Butembo, donde antes se encontraba la delegación de Médicos Sin Fronteras (MSF). “Todo cambió”, explica un empleado del hotel en la investigación. “Veíamos a mujeres jóvenes de la ciudad entrando constantemente por la puerta. Todas las reglas se suavizaron”, dice en referencia a la política de MSF de imponer un toque de queda nocturno y la prohibición de visitantes externos en las habitaciones.
En una de esas habitaciones presuntamente se cometió la violación que una de las mujeres ha denunciado, por parte de un trabajador de la OMS. “Me empujó contra la cama, se puso encima mío y empezó a quitarme la ropa. Traté de salir de debajo de él, pero era más fuerte que yo y me mantuvo allí. Luego me violó. Fue devastador. Pensaba que iría a hablar de trabajo, como una entrevista”, explica. Días después, la mujer recibió un aviso de que podía comenzar a trabajar. “Cada día de trabajo fue miserable. Él estaba allí”, añade. Semanas después, comenzó a sentir dolor se hizo unas pruebas médicas que acabaron diagnosticándole una sífilis.
Otra de las víctimas que también quedó embarazada y tuvo al bebé fue despedida del trabajo a medida que se iba notando los efectos del embarazo. «Estoy cansada. Si no tuviera a la iglesia, solo me gustaría morir, dice sobre lo importante que ha sido para ella el apoyo de una congregación local. «Tengo un hijo que criar sola, sin hogar, y mi familia no me habla», explica.
Respuesta
La OMS también figuró entre las ONG e instituciones con trabajadores acusados en la primera investigación publicada en octubre de 2020. Entonces anunció que compartiría la información con una comisión independiente establecida para investigar las denuncias. “La comisión tomará la iniciativa de la investigación de estas acusaciones y emitirá recomendaciones al director general”, ha explicado la portavoz de la OMS, Marcia Poole.
“Existen diferencias entre el número de denuncias recibidas y reportadas. Pueden haber varias razones para ello, desde los mecanismos de denuncia, que deberían mejorarse, hasta la renuencia de las víctimas para hablar”, ha remarcado.
Desde la OMS sí han confirmado que la Oficina de Investigación de Servicios de Supervisión Interna de Naciones Unidas (OIOS, por sus siglas en inglés) ha identificado a dos mujeres de Butembo que “han mantenido relaciones de explotación sexual con personas relacionadas con la OMS”. “La OMS se compromete a tomar medidas rápidas y enérgicas, incluida la colaboración con las autoridades nacionales pertinentes en los procesos penales, en todos los casos en que nuestro personal pueda ser declarado culpable de perpetrar [explotación y abuso sexuales]”, ha remarcado Poole.
Desde el gobierno congoleño, que suma dos acusaciones contra personal de su Ministerio de Salud, el ministro de Derechos Humanos, André Lite Asebea, ha dicho que “las investigaciones no han avanzado”, refiriéndose a las ocho denuncias formuladas contra los trabajadores del Ministerio de Salud en Beni el año pasado.
Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL – Internacional – Aumentan las acusaciones por casos de abusos contra diferentes ONG en la respuesta al ébola en RD Congo