“En la calle, en casa, en el trabajo. Hoy, al margen de la decisión de secundar una huelga general, los paros de dos horas, acudir a las manifestaciones o hacer lo que cada una decida, emerge un antes y un después en el camino hacia la igualdad real entre hombres y mujeres.
Desde que el pasado mes de enero centenares de grupos feministas decidieron empujar para hacer este 8 de Marzo una huelga total, entendida no sólo como un paro laboral sino poniendo el acento en la huelga de cuidados, el debate se ha ido extendiendo por toda la sociedad, nadie es ajeno a él. Y este es el primer triunfo porque se ha logrado poner sobre la mesa el hartazgo de muchísimas mujeres que ven cómo la igualdad real que propugnan las leyes no tiene correspondencia en el día a día. “Si nosotras paramos se para el mundo” . El lema de la jornada recoge lo que es un doble llamamiento a la protesta y a la reflexión sobre la invisibilización del trabajo de las mujeres, que sólo se ve cuando falta” (La Vanguardia).
Se celebra el Día Internacional de la Mujer Bajo el lema «Ahora es el momento: las activistas rurales y urbanas transforman la vida de las mujeres», la celebración de este Día se suma este año a un movimiento mundial sin precedentes por los derechos, la igualdad y la justicia de las mujeres. El acoso sexual, la violencia y la discriminación contra las mujeres han acaparado los titulares y el discurso público, con una creciente determinación a favor del cambio” (Página de las Naciones Unidas).
¿Necesitamos de días especiales para llamar la atención sobre la desigualdad que se da en nuestro mundo cuando se habla del trato y la desigualdad al ver a los niños, adultos mayores (antes se les llamaba ancianos), personas con discapacidades o mujeres?
Parece que sí, que necesitamos de días especiales porque los seres humanos y sobre todo los hombres discriminamos contra todo y todos. Hasta esta manía discriminatoria se extiende a las religiones, incluyendo el cristianismo cuando se utiliza a las mujeres, pero se le niegan todos los derechos (alguien dijo que las religiones, en su mayor parte son cuestiones de hombres…)
El mejor ejemplo de inclusión que encontramos en la Biblia proviene de los evangelios, en donde Jesús, nacido de mujer destaca el valor de ellas en el discipulado y servicio al que los hombres están también llamados.
Hoy día, saludamos a las mujeres en su día y hacemos votos porque todos los días sean también días de reconocimiento por su valor y hacer en la sociedad.
(Guillermo Serrano, Jueves 8 de Marzo, 2018).