El Foro Mundial del Trabajo llamó a dejar que el evangelio impacte el mundo laboral

Una de las sesiones del Foro Mundial del Trabajo del Movimiento Lausana, en Manila, junio 2019. / Movimiento Lausana Global.

Casi 900 participantes de 110 países soñaron en Manila (Filipinas) con un “gran movimiento de Dios a través de creyentes en su lugar de trabajo”.

“Creo que uno de los próximos grandes movimientos de Dios será a través de los creyentes en su lugar de trabajo”. Esta frase, de alguna manera profética, fue lanzada años atrás por Billy Graham, uno de los fundadores del Movimiento de Lausana.

Ahora, a través del Foro Mundial del Trabajo que se ha celebrado en Manila del 24 al 29 de junio de 2019, se está prestando atención a un tema que queda oculto detrás de ese gran problema de la Iglesia de nuestro tiempo que es la división entre lo sagrado y lo secular.

Espacio de inscripciones. / Movimiento Lausana Global

Los casi 900 participantes procedentes de 110 países, escogidos por el comité de selección entre más de 4.000 propuestas de los comités de Lausana en cada país, pertenecían en su mayor parte al entorno laboral, tanto trabajadores de todas las categorías, hasta emprendedores y empresarios.

8  participantes venían desde España, de varios entornos laborales, académicos y eclesiales.

Diferentes ponentes compartieron sobre la misión en el mundo laboral. / Movimiento Lausana Global

A pesar de que pasamos la mitad de nuestra vida despiertos relacionándonos con el mundo del trabajo, no hemos sabido conectar nuestra fe en Cristo con aquello que ocupa una parte tan importante de nuestras vidas.

Hemos perdido una gran oportunidad para el testimonio personal. No hemos sabido aprovechar nuestro trabajo como un medio para transformar los entornos en los que vivimos y la sociedad en general. Hemos perdido una oportunidad de desarrollar los talentos y los dones que Dios nos dio en aquello en lo que invertimos tanto tiempo cada semana.

El Foro Mundial del Trabajo ha realizado un llamamiento a unir  fuerzas para avanzar en la tarea de la misión global. Necesitamos tanto a los pastores, como a los trabajadores, como a las entidades para realizar una tarea que ninguno de esos grupos por separado podrá realizar.

El encuentro se partía cada día en decenas de grupos de trabajo. / Movimiento Lausana Global

Michael Oh, Director del Movimiento de Lausana, en la inauguración llamaba la atención de los asistentes a que es imposible cumplir la tarea que el Señor ha encomendado a su iglesia si el 1% de los cristianos, es decir los pastores y los misioneros, son los que hacen el ministerio, mientras el 99% restante simplemente ‘colabora’ en el ministerio de los primeros. Si esto se trasladase al mundo de la empresa, un 1% haría el trabajo esencial, mientras que el 99% hace tareas de soporte: la empresa no sería viable, no podría subsistir.

Mientras no nos demos cuenta de que el Señor ha llamado a todos los cristianos y que la tarea del 1% es ayudar al 99% a cumplir su misión, el llamado que Dios nos ha dado no se podrá llevar a término. “La mayor parte de la Iglesia son espectadores y el cristianismo se ha convertido en un juego de espectadores” decía John Ng’ang’a.

Cada día se ofrecieron seminarios, talleres, laboratorio de ideas. / Movimiento Lausana Global

A través de plenarias, casos prácticos, seminarios de temas concretos, visitas a empresas y proyectos solidarios, laboratorios en los que se formulaban preguntas para que los presentes sugirieran respuestas desde áreas de conocimiento y experiencias distintas, etc. se han planteado temas tan necesarios como las injusticias en el lugar de trabajo, la plantación de nuevas iglesias en los lugares de trabajo, las enfermedades conectadas con las malas prácticas en el trabajo, la pobreza, el tráfico de personas y la esclavitud, la capacidad creativa en los lugares de trabajo, el empoderamiento de las mujeres, el trabajo de los que trabajan en casa, el desafío de las grandes ciudades, la tecnología y la inteligencia artificial, etc.

Michael Oh, director del Movimiento Lausana, abrió el encuentro. / Movimiento Lausana Global

Michael Oh aprovechó la plenaria que cerraba el Foro para lanzar el IV gran encuentro del Movimiento de Lausana que tendrá lugar en 2024 (después de Lausana 74, Manila 89 y Ciudad del Cabo 2010).

El Foro Mundial del Trabajo ha sido el inicio de un camino que debe llevar a la Iglesia en el mundo a este próximo encuentro. Pidió que en todos los encuentros regionales del Movimiento de Lausana que se celebren hasta llegar a 2024 se tenga en cuenta el énfasis del ministerio en el lugar de trabajo, para hacer visible el impacto del Reino en cada esfera de la sociedad.

Fuente: http://protestantedigital.com/sociedad/47329/Foro_Mundial_del_Trabajo_llamo_a_dejar_que_el_evangelio_impacte_el_mundo_laboral