Antes no se conocía ni se hablaba de este problema que afecta a millones de personas. Ahora, sí sabemos más. La enfermedad celíaca ha sido considerada tradicionalmente como un trastorno únicamente digestivo, pero actualmente se sabe que se trata realmente de una enfermedad crónica, multi-orgánica autoinmune, que afecta al intestino y puede dañar prácticamente cualquier órgano o tejido. Es inducida por la ingesta de gluten, en personas con predisposición genética. Si bien se produce una «intolerancia permanente» al gluten, no se trata de una simple intolerancia alimentaria, ni mucho menos de una alergia. Sin el tratamiento estricto y mantenido de por vida, puede provocar complicaciones de salud muy graves, entre las que cabe señalar diversos tipos de cáncer (tanto del aparato digestivo, con un incremento del riesgo del 60%, como de otros órganos), trastornos neurológicos y psiquiátricos, otras enfermedades autoinmunes y osteoporosis