Mateo 5:27-37
INMORALIDAD SEXUAL
"Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón".Mateo 5:27-28
Hace años, asistí a una conferencia donde un reconocido orador cristiano afirmó que uno de los mayores desafíos para el cristianismo en Occidente era el consumo de pornografía. Las estadísticas dentro de la comunidad cristiana son alarmantes, y su impacto es devastador. Daña a individuos, debilita matrimonios, distorsiona la percepción del amor y la intimidad, y deja a muchos atrapados en la culpa, alejándolos de Dios en lugar de acercarse a Él en busca de restauración.
A lo largo de la Biblia, Dios nos llama a la fidelidad y nos advierte sobre el daño de la inmoralidad sexual. No solo destruye la confianza en las relaciones, sino que también reduce a las personas a meros objetos, en lugar de reconocerlas como portadoras de la imagen de Dios. La Escritura usa el matrimonio como un reflejo de la relación de Dios con su pueblo, mostrándonos que la fidelidad no es solo un mandato moral, sino una expresión profunda del amor de Dios por nosotros.
En lugar de ignorar o esconder el problema, como iglesia debemos hablar con honestidad, traer luz a estas luchas y ofrecer un camino de sanidad. En Cristo hay gracia, restauración y poder para vivir en fidelidad. No se trata solo de evitar el pecado, sino de experimentar la plenitud de una relación con Dios que transforma nuestra manera de amar.
Santo Dios, reconocemos nuestro pecado. Perdónanos y libéranos de la tentación. Restaura nuestra relación contigo y con quienes hemos herido. En Jesús, Amén.