Hebreos 11:1-16
CÓMO ACERCARSE A DIOS
“Pero no es posible agradar a Dios sin tener fe, porque para acercarse a Dios, uno tiene que creer que existe y que recompensa a los que lo buscan”.
Hebreos 11:6
Mucha gente se equivoca en un asunto bastante elemental: cómo acercarse a Dios. Hay quienes lo hacen a través del uso de mantras o limpiezas espirituales. Otros lo hacen por medio de ritos o tradiciones dentro de una religión particular. También hay quienes creen que la búsqueda de Dios se logra mediante un viaje al interior, por lo que cada quien debe encontrar su propia manera de conectarse con lo sagrado.
Este pasaje nos dice que el primer paso para acercarse a Dios es creer en su existencia. Dios no es simplemente el resultado de una argumentación lógica o un postulado moral. Es un ser real y personal con atributos como el amor, la justicia y la misericordia. Conocer a Dios en profundidad fortalece nuestra fe y nos permite acercarnos a Él con confianza.
La fe con la que nos acercamos a Dios implica acción. No es pasiva, sino que nos mueve a buscar activamente a Dios en oración, en la lectura de las Escrituras, y en la obediencia a su voluntad. La fe nos impulsa a vivir de acuerdo a los principios divinos, confiando en que Dios está con nosotros y que cumplirá sus promesas. La fe nos lleva a creer en su existencia y a confiar en que Él recompensa a quienes le buscan con sinceridad. Es un llamado a vivir una vida de fe activa y profunda, confiando plenamente en Dios y buscando su presencia y dirección en nuestras vidas.
Dios de amor, te pido que mi fe se fortalezca en tus promesas, así como lo hiciste con nuestro antepasado, confío en que cumplirás tu propósito en mi vida. En Jesucristo, amén.