23 de octubre del 2023
Génesis 43:1-14
TIEMPO DE RESIGNACIÓN
“Puesto que no hay otro remedio, hagan esto”.Génesis 43:11
Jacob ha agotado todas sus opciones. Gran parte de su vida la ha ocupado luchando. Ha gastado muchos recursos y energías intentando garantizar que recibirá las bendiciones de Dios, que las cosas saldrán a su favor. Saber que solo nos queda la reserva no es una experiencia divertida. El grito de Jacob aquí es de resignación, no de confianza en la providencia de Dios. Ha aceptado la tregua porque no le quedan más armas con las cuales seguir peleando. Pero es cuando Jacob decide dejar de luchar con sus propias fuerzas, que finalmente descubre la gracia de Dios. ¿Dónde te has quedado atascado? Tal vez acabas de descubrir lo impotente que eres para controlar a tu cónyuge o a tus hijos, o para superar a los demás en el trabajo. O quizá sea el fracaso en tus intentos por vencer una adicción o una tentación que no desaparece, o el temor al castigo por un pecado que creías olvidado. O tal vez apenas te has dado cuenta de que has estado tratando de “pagar a Dios” con tus buenas obras con la esperanza de que te dé lo que quieres en la vida. Es tiempo de rendirte. Quedarnos sin opciones puede ser un don de la gracia de Dios porque nos enseña que no podemos salvarnos a nosotros mismos. Y una vez que aprendemos esa importante verdad, podemos comenzar a confiar en el cuidado providencial de Dios y en su obra salvadora a través de Jesús.
Espíritu Santo, ayúdanos a deponer nuestras armas. Haznos ver cuánto necesitamos la gracia salvadora que viene de Jesús. Enséñanos a confiar no en nosotros mismos sino solo en Cristo. En su nombre, amén.
Jacob es uno de mis personajes favoritos de la Biblia. Pero no creo que me hubiera gustado tanto si lo hubiese conocido al principio de su vida. Era astuto, manipulador y hábil. Actuaba por interés propio y no pensaba mucho en los demás. Pero Dios lo amaba, y el libro de Génesis muestra cómo Dios persiguió y ablandó el corazón de Jacob hasta que finalmente comprendió que la bendición de Dios viene sólo por gracia. Esa verdad cambió la actitud de Jacob hacia Dios y hacia los demás. Y esa es una lección que todos necesitamos aprender. Puede que nuestros desafíos y pecados no sean los mismos que los de Jacob, pero necesitan de igual manera el poder transformador de Cristo. Todos necesitamos profundamente la seguridad de que Dios nos salvará. Y por su gracia, todos los que creen en Jesucristo, el Hijo de Dios, como Salvador, serán transformados para disfrutar de una vida plena con él para siempre.
Joel Vande Werken
Joel Vande Werken ha sido pastor desde el año 2007, sirviendo en iglesias en Sussex, Nueva Jersey, y en Whitinsville, Massachusetts. Él y su esposa, Brandie, tienen cuatro hijos pequeños.