Génesis 37:1-11
RECETA PARA EL DESASTRE
“Israel quería a José más que a sus otros hijos”.Génesis 37:3
Después de establecerse en la tierra que Dios les había prometido, los conflictos en la familia de Jacob se intensificaron. Raquel, la madre de José, siempre había sido la esposa favorita de Jacob (ver Génesis 29:30). Y ese favoritismo ahora comienza a afectar a la siguiente generación. José es el nuevo favorito, y sus sueños revelan una actitud que irrita no solo a sus hermanos sino también a su padre.
A veces, nuestros pecados pasados reaparecen justo cuando pensamos que hemos comenzado a consolidarnos y crecer en nuestra relación con Dios. Quizás pensamos que habíamos dejado atrás nuestras luchas matrimoniales, nuestros conflictos con un compañero de trabajo o nuestras luchas contra la adicción. La obra del Espíritu de Dios en nuestra vida nos reanima. Sin embargo, descubrimos que todavía tenemos momentos de lucha y tentación, y a veces recaemos en patrones de conducta pecaminosos.
La Biblia no es una historia de superhéroes espirituales que han “llegado” al final de su caminar con Dios. Es la historia de Dios obrando en la vida de las personas, redimiéndolas y restaurándolas a la plenitud por medio de Cristo. Aunque enfrentamos tentaciones y luchas tenemos un Salvador comprensivo y compasivo (ver Hebreos 4:15). Así como Dios continúa obrando en la vida de Jacob, él sigue también trabajando poderosamente en nuestras vidas.
Padre Celestial, nuestros pecados y debilidades a veces nos dominan. Ten misericordia de nosotros, redímenos y sánanos por amor a Jesús. Amén.