25 de septiembre del 2023
Hechos 7:51-60
LA LAPIDACIÓN DE ESTEBAN
“Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu”.Hechos 7:59
Si es de los que piensan que la fe en Cristo le puede servir como aislante de la maldad de otros, el relato del martirio de Esteban no justifica esa percepción. Es cierto que Cristo ha prometido preservar a su iglesia, pero él puede usar la adversidad y persecución para incentivar la fidelidad de su pueblo. Y después de un inicio fulgurante la iglesia va a enfrentar la oposición enérgica de los líderes religiosos del pueblo de Israel. En el caso de Esteban, los enemigos de la fe tuvieron que inventar cargos y hacer uso de testigos falsos para poder incriminarle. ¿Le suena familiar? En su discurso de defensa Esteban les muestra que son ellos quienes repetidamente se han resistido a la obra del Espíritu Santo. Esto no hizo más que enfurecer a los líderes religiosos. ¿Cómo pudieron el sumo sacerdote y los otros líderes estar tan ciegos y ser tan crueles? Si condenaron a un inocente a ser apedreado, es porque sus corazones eran de piedra. ¡Qué ejemplo nos da Esteban de cómo enfrentar la injusticia! Aunque su lapidación fue inmerecida, él demostró que su corazón estaba lleno del Espíritu de Dios. Nada, ni siquiera el dolor que el golpe de las piedras le producía pudieron impedir que él reflejara un carácter semejante al de Jesucristo. Si alguna vez nos llega un momento así, podemos hacer lo mismo, con la ayuda de Dios.
Señor, llena nuestros corazones con tu Espíritu para que en toda circunstancia reflejemos el amor de Jesús y permanezcamos firmes en la fe. En el nombre de tu Hijo, Amén.
La mayoría de nosotros hemos paseado alguna vez por la orilla del mar, buscando con atención, rocas o piedras que nos parezcan especialmente bellas y llamativas. Este mes de septiembre, se destacan las rocas y piedras que se mencionan en la Biblia. La Biblia utiliza todo tipo de metáforas para revelarnos la verdad. Dios sabe que, a veces, las cosas más obvias que nos rodean pueden revelarnos cosas profundas. Por ejemplo, las rocas y las piedras, materiales no vivos que hay por toda la tierra, se mencionan a menudo en la Biblia. Quizá se te ocurran algunas referencias bíblicas a rocas o piedras. Jesús fue tentado por Satanás para que convirtiera las piedras en pan, Moisés golpeó una roca en el desierto y brotó agua, y los salmos se refieren a menudo a Dios como nuestra roca y nuestra fortaleza. Esperamos que al leer los devocionales de este mes te sientas renovado en la Palabra de Dios.
Julia Prins Vanderveen
Trabaja y vive en Vancouver, Columbia Británica, con su esposo, Trevor, y sus tres hijos. Julia ha trabajado junto con su esposo pastoreando en una iglesia de Vancouver. Sirve además de capellán y profesora de humanidades en la Escuela Cristiana de Vancouver.