19 de julio del 2023
Proverbios 11:20-25
GENEROSIDAD
“El que es generoso prospera; el que da, también recibe”.Proverbios 11:25
En Hechos 20:35 Jesús dijo: "Es mejor dar que recibir". Pero ¿por qué se menciona esto? ¿Es porque se siente bien ser generoso? ¿Es porque nos sentimos apreciados cuando damos? ¿Es porque existe un ciclo donde las cosas que van tienen que volver? Proverbios 11:25 dice que “el que es generoso prospera”. ¿Y qué significa prosperar? Tendemos a pensar de prosperidad en términos financieros, pero eso sería reducir su significado. En la Biblia, la prosperidad tiene mucho que ver con el bienestar y florecimiento, con disfrutar la plenitud de vida que Dios quiere para nosotros. Leer la segunda mitad de este versículo nos ayuda a entender: “El que da, también recibe”. No se trata tanto de ganancia material como del cuidado del alma. Trae a la mente el Salmo 23, en el cual el Señor como nuestro pastor nos conduce “a aguas tranquilas” y refresca nuestra alma. Nuestras almas reciben nuevo vigor a través de la generosidad porque cuando buscamos la prosperidad, la salud y el bienestar de los demás, nosotros mismos recibimos el aliento de Jesús en el proceso. Él nos bendice y nos llena de humildad, alegría, paciencia, amabilidad, bondad y demás. Nos volvemos más como él que renunció a sus privilegios divinos por nuestro bien. No damos para que podamos obtener algo a cambio. Damos para que podamos estar más cerca del corazón de Cristo.
Generoso Dios, tú me has mostrado el perfecto ejemplo de entrega, amor y humildad de Jesucristo. Permíteme ser más como él y encontrar en su regazo aliento para mi alma. En Jesús, amén.
Durante gran parte de mi vida, evité el libro de Proverbios en la Biblia. Simplemente no me intrigaban ni interesaban sus breves y concisas declaraciones, que parecían no aplicarse mucho a mi vida. Había poca o ninguna narrativa o historia, y no alcanzaba a ver mucha conexión con la historia bíblica. Tampoco parecía haber alguna conexión con Jesús. Pero cuando leí el libro de Proverbios hace unos años, me sorprendió la frecuencia con la que las enseñanzas de Jesús se reflejan en estas palabras. Eso es porque los dichos sabios y la sabiduría general que se encuentra en Proverbios fluyen de la sabiduría de Dios, manifestada en el don de Jesucristo, el Hijo de Dios, nuestro Señor y Salvador. Este mes, les invito a que redescubramos el libro de Proverbios y reflexionemos sobre algunos de los tesoros que ofrece. Nos centraremos en una serie de proverbios que se encuentran en la primera mitad del libro, y mi oración es que estas páginas le inspiren a explorar más el libro. Oramos porque Jesús nos conceda el Espíritu de sabiduría mientras buscamos conocerlo más.
Jenna Fabiano
Sirve en el ministerio en la Iglesia Willoughby en Langley, Columbia Británica. Ella y su familia viven cerca de Coquitlam, B.C.