06 de agosto del 2022
Marcos 16:14-18
EL EVANGELIO DEBE SER PREDICADO
“Y les dijo: «Vayan por todo el mundo y anuncien a todos la buena noticia”. Marcos 16:15
El texto anterior habla de la gran comisión que Jesús dio a sus discípulos después de su resurrección. Destacamos algunos puntos. Primero, se da una orden. Predicar el evangelio no es una opción sino una obligación. El evangelio no se puede retener; debe ser proclamado. En segundo lugar, se define un campo de acción. El evangelio debe predicarse en todo el mundo. Ninguna nación debería quedar fuera de este ámbito. Cristo murió para comprar con su sangre a los que provienen de todas las etnias de la tierra.
En tercer lugar, se define un mensaje. Los discípulos no deben predicar la cultura religiosa de cada pueblo, ni los usos y costumbres de una denominación religiosa, ni el pensamiento teológico de ciertos exponentes religiosos, ni el evangelio de la conveniencia, que no es más que una panacea para los males de esta vida. Los discípulos deben ir por todo el mundo predicando el evangelio, las buenas nuevas de salvación en Cristo.
Cuarto, se establece un rango. El evangelio debe ser predicado a toda criatura. El evangelio es para judíos y gentiles, hombres y mujeres, ricos y pobres, eruditos y analfabetos. El evangelio debe alcanzar un radio de acción tan amplio como el mundo y debe ser tan específico como para llegar a todas las criaturas. ¿Hemos cumplido este mandato expreso de Jesús?
Padre, queremos ser iglesias que vayan por los perdidos, no queremos refugiarnos en nuestros templos. Ayúdanos a lograrlo. Por Jesús, amén.
Nos complace presentar a nuestros lectores, el devocional Cada día de agosto del 2022. Creemos que es un tiempo propicio para recordar a la iglesia la importancia de la misión. El evangelio son las buenas nuevas del cielo a la tierra, las mejores y más grandiosas noticias de Dios para los hombres. Estamos convencidos de que su corazón arderá con estas sublimes verdades que emanan de la palabra de Dios. Esperamos que sus ojos se abran para contemplar la incomparable grandeza de nuestro glorioso Salvador. Tenemos el ardiente deseo por que tus pies se apresuren y tus labios se abran para anunciar a tiempo y fuera de tiempo, en el poder del Espíritu, este mensaje que convence y salva al pecador. Lea y medite en cada mensaje. Absorba con vivo interés esta palabra de vida. Proclame con un sentido de urgencia el poderoso evangelio, el evangelio de nuestra salvación. No apagues la voz. ¡Predica este evangelio aquí, allá y más allá!
Hernandes Dias Lopes
Hernandes Dias Lopes está casado con Udemilta y viven en Sao Paulo Brasil en compañía de sus dos hijos. El pastor Hernandes Viaja alrededor del mundo para predicar y enseñar la Biblia.