Zacarías 7:8-14
LA JUSTICIA Y LA ADORACIÓN
“Esto es lo que yo ordeno: Sean ustedes rectos en sus juicios, y bondadosos y compasivos unos con otros”. Zacarías 7:9

Si en alguna ocasión le hicieran la pregunta de Miqueas 6:8: “¿Qué pide el Señor de ustedes?” tal vez ya sepan la respuesta: “solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios”. Tal vez hasta lo hayamos cantado con una melodía pegadiza. Y la respuesta es correcta, aunque a veces intentamos evadir sus implicaciones. Dios nos llama, como una cuestión de reverencia a él, a actuar con justicia en nuestra vida cotidiana, sin dejarnos cegar por quienes detentan el poder. Honramos a Dios no sólo actuando con imparcialidad, sino también al mostrar misericordia y compasión. Dios mismo aclara que debemos buscar la justicia para los que no son socialmente poderosos: la madre soltera, los niños huérfanos, los inmigrantes, los pobres. Dios declara, en efecto, a través de Zacarías: “Ni siquiera quiero su adoración si se aprovechan de los más débiles de entre ustedes y no los defienden. Están adorando sólo para sentirse mejor, no para honrarme”. Son palabras fuertes. El sufrimiento de la gente de otra comunidad, y mucho más el de otros en todo el mundo, puede ser invisible. Hacer justicia y mostrar misericordia requiere que nos preocupemos por nuestros hermanos y hermanas. Pide a Dios que te muestre formas de cuidar a los marginados. ¿Qué actos de misericordia haces por tu familia y tu comunidad?

Bendito Dios, ayúdanos a mostrar misericordia y haznos amantes de la justicia, para que podamos tener un impacto en este mundo para ti. En el amor de Jesús, Amén.
PHP Code Snippets Powered By : XYZScripts.com