Apocalipsis 12:1-17

EL PODER DE NUESTRA HISTORIA

“Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte”. Apocalipsis 12:11

Todos tenemos una historia. No siempre es fácil contarla. Algunas partes nos duelen, otras nos llenan de gratitud, y muchas veces creemos que no es lo suficientemente importante. Pero cuando el libro de Apocalipsis habla de los que vencen al enemigo, menciona dos cosas: la sangre del Cordero… y la palabra del testimonio. ¡Tu historia importa! Porque no es solo tuya: es evidencia viva de lo que Dios ha hecho, está haciendo y seguirá haciendo en tu vida. Cuando compartes lo que Cristo ha transformado en ti, estás participando en esa victoria que Apocalipsis describe. El testimonio no es adorno; es arma. No se trata de tener una historia espectacular, sino de ser fiel al contar cómo la sangre del Cordero te ha alcanzado y sostenido. Eso tiene más poder del que imaginas. Tu testimonio puede abrir los ojos de alguien que ha perdido la esperanza. Puede ser la chispa que encienda la fe en un corazón apagado. Puede romper cadenas que nadie más ve. Dios es el gran narrador, y tu vida es uno de sus capítulos. Él escribe con propósito, incluso en medio de nuestras luchas. Por eso, no escondas lo que Dios ha hecho por ti. No dejes que el miedo, la vergüenza o la idea de que “no es gran cosa” te impidan hablar. Habla. Comparte. Da testimonio. Porque cada vez que lo haces, el enemigo pierde terreno… y la luz de Cristo se abre paso en la oscuridad.

Padre, gracias porque me permites testificar de tu bondad y amor en mi vida. Ayúdame a reconocer el poder de mi historia y dame el valor de compartirlas para tu gloria. En Cristo Jesús, Amén.