21 de agosto del 2025
2 Corintios 13:11-14
PAZ CON LOS DEMÁS
“Anímense y vivan en armonía y paz; y el Dios de amor y de paz estará con ustedes”.2 Corintios 13:11
Un director de orquesta estaba dando un paseo tranquilo cuando de repente los sonidos de unos instrumentos musicales mal tocados captaron su atención. Los ruidos desafinados procedían del viejo edificio de una iglesia. Al entrar con la intención de protestar se dio cuenta de que la fuente del ruido era la orquesta de una iglesia ensayando. Pero la gente que conoció era amistosa, humilde y estaba muy apenada. En lugar de contraatacar, los hermanos lo invitaron a quedarse para el servicio. Fue ahí que, por primera vez en su vida, este hombre escuchó la predicación del evangelio. La hermosa armonía de la gracia de Dios movió su corazón al arrepentimiento. Se convirtió al cristianismo y se unió a la iglesia unos meses después. La Segunda Carta de Pablo a los Corintios parece como una música desafinada. Había problemas de todo tipo, y, sobre todo, había quienes desafiaban el liderazgo espiritual del apóstol Pablo. Sin embargo, al final de esta carta Pablo les llama a vivir en mutua armonía y paz. Las relaciones armoniosas en la iglesia de Cristo expresan la experiencia más plena del amor de Dios. Cuando reflejamos el amor de Dios a los demás, no se trata de una simple mejora en las relaciones interpersonales; como creyentes crecemos en nuestra comprensión de la gracia de Dios y el Dios de paz está más que contento de morar entre su pueblo.
Padre, ayúdanos a reflejar tu paz en este mundo. Y permite que sigamos creciendo en nuestra experiencia de tu amor y paz. En el nombre de Cristo oramos. Amén.
A lo largo de la historia de la humanidad, el hombre siempre ha conocido, buscado y necesitado el poder mayor que proviene de Dios. Sin embargo, las filosofías modernas, o no tan modernas, han introducido en la mente humana el concepto de dioses y deidades, a quienes pueden acudir en busca de ayuda en un momento de desesperación. Como cristianos, tenemos el deber, la obligación y el compromiso de proclamar que sólo en Dios podemos alcanzar el éxito en nuestras vidas, planes y deseos. Sólo bajo el poder de Dios podremos completar nuestro camino, pues es de quien dependemos. Dios es bueno todo el tiempo y está dispuesto a ayudarnos… Está a solo una oración de corazón, busquémosle juntos. ¡Feliz lectura!
Edison Souza
Periodista y presbítero en La Iglesia Presbiteriana de Campinas, São Paulo, Brasil.