Juan 4:1-26
LA ADORACIÓN QUE DIOS BUSCA
"Los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad..." Juan 4:23
Cuando se trata de la adoración a Dios, las opiniones suelen estar divididas. Basta con observar cómo se lleva a cabo en diferentes iglesias para notar las marcadas diferencias. Esto ha generado, con frecuencia, controversias intensas sobre cuál es la forma correcta de adorar. Algunos fundamentan su postura en la tradición, otros en su interpretación de la Escritura, y algunos más en la libertad del Espíritu.
Lo que sorprende en este pasaje son las personas que protagonizan esta conversación sobre la adoración. Por un lado está Jesús, el Hijo de Dios, quien, seguramente cuenta con información confidencial acerca del tema. Por el otro, está una mujer de dudosa reputación, quien decide hablar del asunto para cambiar el rumbo de la conversación. Lo que ella no imagina es que las palabras de Jesús no solo van a desafiar su manera de pensar, sino que van a transformar su vida para siempre.
La verdadera adoración tiene que ver con algo más que rituales y lugares sagrados. Adorar en espíritu y en verdad es más que cantar en un servicio o seguir una tradición. Es un acto profundo que involucra nuestro ser interior y nuestro conocimiento de Dios. Es una adoración sincera, guiada por el Espíritu, basada en la verdad de la Palabra y enfocada en Jesús. Y tales adoradores, son los que el Padre celestial busca que le adoren.
En Espíritu y en verdad, Señor, queremos adorarte. Que nuestras vidas sean una ofrenda continua, que testifique de tu gloria y amor al mundo. Amén.