Efesios 6:10-24
VESTIDOS PARA LA VICTORIA
"Protéjanse con toda la armadura que Dios les ha dado, para que puedan estar firmes contra los engaños del diablo". Efesios 6:11
La vida cristiana no es un camino sin desafíos; es un campo de batalla. Cada día nos enfrentamos a luchas espirituales, y el enemigo no pierde oportunidad para distraernos, desanimarnos y engañarnos. ¡Qué bueno es saber que no estamos indefensos! En Cristo, no solo tenemos protección, sino que estamos equipados para la victoria.
Dios nos ha dado una armadura poderosa para resistir las artimañas del diablo. Nos ciñe con el cinturón de la verdad, nos protege con la coraza de la justicia, nos equipa con el calzado de la paz y nos cubre con el escudo de la fe. Nos da el yelmo de la salvación y, como arma ofensiva, la más poderosa de todas: la espada del Espíritu, su Palabra viva y eficaz.
Pero una armadura sin estrategia no es suficiente. Debemos estar atentos y orar sin cesar. Confiemos que Dios va al frente, guiándonos y fortaleciéndonos en cada enfrentamiento. La victoria no depende de nuestra fuerza, sino de su poder obrando en nosotros. Puede que nuestras armas no luzcan intimidantes a los ojos del mundo, pero son más poderosas que cualquier estrategia humana. Por eso, mientras libramos guerras espirituales, profundicemos en la Palabra, permitiendo que sea nuestra guía y protección. Que nuestras oraciones sean fervientes, nuestra confianza inquebrantable y nuestro corazón valiente, sabiendo que la batalla ya está ganada en Cristo.
Dios Poderoso, fortalécenos para la batalla espiritual. Ayúdanos a permanecer firmes en verdad, justicia, fe y tu Palabra. Concédenos la victoria sobre el mal. En Jesús, amén.