02 de febrero del 2023
Isaías 55:1-13
EL PODER DEL EVANGELIO
“Así también la palabra que sale de mis labios no vuelve a mí sin producir efecto…” Isaías 55:11
El río Nilo nos ofrece una enseñanza profunda acerca del poder del agua para dar vida. A uno de sus lados, pueden verse campos verdes y fértiles. Del otro, puede verse solo un interminable desierto. En el tiempo de Isaías, la gente tenía la condición precaria de vivir en una tierra árida. Cada año, las lluvias del otoño renuevan la vida de los áridos campos de Palestina. Lo mismo es cierto de la Palabra de Dios. Conocemos el poder de Dios porque le vemos cambiar vidas en las diferentes formas en que se predica: púlpito, calles, radio, televisión, redes sociales, etc. Y estamos agradecidos por el poder de la Palabra de Dios. Estoy convencido que su mensaje hace una diferencia eterna. ¿Por qué? Porque como Isaías enseña, la Palabra de Dios está en acción en el mundo, y nunca falla en alcanzar el propósito divino. O, como Hebreos 4:12 lo dice, la Palabra de Dios “es viva y eficaz”. Esto podemos verlo también en nuestra propia vida. Muchos hemos vivido encadenados a alguna forma de pecado que convierte nuestra vida en un desierto espinoso. Algunas personas anhelan una transformación, desean darle un giro a su vida, pero no saben dónde comenzar. He aquí una sugerencia: ¡Riega los lugares secos de tu vida con la Palabra de Dios! Los resultados te dejarán sorprendido.
Oh, Dios, con tu Palabra podemos lograr lo que jamás podríamos imaginar. Ayúdame a sumergirme en ella. En el nombre de Jesús, amén.
¡Qué glorioso es el evangelio de Jesucristo! Es una noticia sublime que merece ser pregonada en todos los rincones del mundo. Cada nación está contemplada en el plan de Dios para escucharla, y la tarea no quedará consumada hasta que la tierra sea llena del conocimiento del Señor. Pero qué hermoso es también saber que cada cultura contribuye a un mejor aprecio de esta buena noticia. Hay lugares donde recibir a Jesucristo les ha acarreado oposi- ción y rechazo. En algunas culturas la hostilidad hacia los creyentes se manifiesta con estilos de vida que amenazan con ahogar la buena semilla. Damos gracias a Dios por aquellas regiones donde el evangelio ha ayudado a transformar no solo a individuos sino a sociedades enteras. Es por eso que estas reflexiones buscan motivarnos a recordar que pertenecemos a una comunidad que traspasa las barreras de raza y lengua. ¡Esperamos que Dios a través de su Espíritu Santo nos permita interceder por los hermanos de otras regiones del mundo!
Ministerio Reforma
Este devocional proviene de la pluma de diversos contribuyentes de varias naciones para celebrar la diversidad del pueblo de Dios en distintos continentes.