Efesios 5:31-33
CRISTO Y EL MATRIMONIO
“Aquí se muestra cuán grande es el designio secreto de Dios. Y yo lo refiero a Cristo y a la iglesia”.
Efesios 5:32
A la hora de hablar del matrimonio las bromas no faltan. Si las ha escuchado, la mayoría de ellas reflejan un concepto bastante pobre del matrimonio. A veces lo comparan con una cárcel, una película de terror o hasta con el mismo infierno, y hay, incluso, quienes no lo hacen en tono de broma. ¿Qué concepto tiene de esta relación a la que la Biblia considera una institución divina?
La unión conyugal es una idea cuyo origen se encuentra en el cielo, no en la historia. Es Dios mismo quien elabora el diseño a partir de la relación de Cristo con la iglesia. Y no creo que el matrimonio pudiera formarse a partir de un patrón más adecuado, pues por eso, llama a la iglesia, la esposa del Cordero. La fidelidad y la intimidad de esta relación llevan a decir al apóstol Pablo, “cuán grande es el designio secreto de Dios”.
Y esto debe servirnos de inspiración a aquellos que estamos casados, y que seguramente no estamos exentos de conflictos en nuestra relación. Su matrimonio, por muy imperfecto que parezca, es un reflejo de la relación eterna entre Cristo y su iglesia. Dios lo instituyó no para darnos una probada del infierno, sino un anticipo del cielo. Por esto, no se desaliente, y anímese, pensando en lo que Cristo estuvo dispuesto a hacer al dar su vida por su esposa, y ¿no podremos nosotros superar las dificultades que enfrentamos en el presente?
Padre celestial, gracias por establecer nuestras relaciones más queridas a partir de un patrón celestial. Ayúdame a valorar el matrimonio como tú lo haces. En Cristo, amén.