Génesis 49:22-26
SEA UNA RAMA FRUCTÍFERA
“José es como una planta junto al agua, que produce mucho fruto y sus ramas trepan sobre el muro”
Génesis 49:22
El libro de Génesis registra la historia de José, el hijo de Jacob, nieto de Isaac, y bisnieto de Abraham. En este pasaje se le llama una rama fructífera. Su vida fructificó en el hogar, en el exilio, en la prisión, en el trono. Fue bendecido como esclavo, como prisionero y como gobernador. Fue fiel a Dios en la adversidad y en la prosperidad. Honró a Dios cuando fue víctima de la injusticia y no actuó injustamente cuando tenía poder en sus manos para vengarse.
El secreto de José para ser una rama fructífera estaba en su cercanía a la fuente. El poder de su vida victoriosa no emanaba de sí mismo. Su comunión con Dios era la razón de su vida abundante. Como conocía la fidelidad de Dios jamás negoció sus valores para sacar provecho. Así fuese en las horas más amargas, o al lidiar con situaciones más ásperas, sabía que Dios tenía el control de su vida.
Por esa causa, José fue una rama que extendía sus gajos por encima del muro. Porque fue fiel en lo poco, Dios le colocó en el trono de Egipto, para que en un tiempo de hambruna salvara al mundo de la miseria. Se le da el nombre de salvador del mundo porque, en los años de vacas flacas, él abrió los graneros de Egipto para alimentar a las naciones. Usted, también, puede ser una rama fructífera dentro de su familia, en el trabajo, en su nación y más allá de las fronteras.
Bendito Dios, gracias por bendecirnos, y usarnos para ser bendición a otros. En Jesucristo. Amén.