Levítico 25:14-19
CUANDO DIOS HABLA DE NEGOCIOS
“No abuse nadie de nadie. Muestren reverencia por su Dios, pues yo soy el Señor su Dios.
Levítico 25:17
Cuando se compra una casa o un coche se puede sentir algo de temor. Hay mucho dinero en juego y queremos estar seguros de que el vendedor no esconde algo. En Levítico 25, Dios habla de negocios. A través de Moisés, Dios instruye a su pueblo sobre la compra y venta de los bienes que les ha dado. La clave, dice Dios, es evitar aprovecharse unos de otros por temor a él. La forma en que nos tratamos unos a otros es importante para Dios y es un reflejo de nuestra relación con él. No podemos amar a Dios sin considerar también lo que es mejor para los demás.
Sin embargo, es fácil dar por sentado que nos tratamos bien. Los niños creen que su mamá siempre estará disponible para llevar a la escuela el desayuno o la tarea que olvidaron. Los cónyuges hacen suposiciones sobre quién debe pagar las cuentas o tener la cena lista. Esperamos que los demás estén siempre ahí para satisfacer nuestras necesidades o que la gente tenga lo que se merece. Si no se esfuerzan más o no saben hacerlo mejor, merecen pagar un precio más alto o quedarse sin nada.
Pero Dios nos dice que tratemos bien a los demás en honor a Él. Puede que pensemos que los demás no merecen nuestra consideración o no se han ganado nuestro respeto, pero el amor que Dios nos tiene nos exige ver a los demás como él los ve. ¿Quién necesita hoy una nueva mirada suya?
Señor, ayúdanos a ver a los demás a través de tus ojos y a tratarlos con respeto gracias a ti. Danos la gracia de superar nuestro egoísmo y de honrarte en nuestras relaciones. Amén.