03 de octubre del 2023
Génesis 27:1-14
UN PLAN SIN GRACIA
“Va a pensar que me estoy burlando de él; entonces haré que me maldiga en lugar de que me bendiga”.Génesis 27:12
Hay momentos decisivos en la vida. Para Jacob ese momento llega cuando su padre, Isaac, está a punto de conferir la bendición como hijo mayor a su hermano Esaú. Aquello por lo que tanto había luchado, parece perdido, pero su madre tiene otros planes. Aprovechando la vejez y ceguera de su padre, su madre lo incita a hacerse pasar por su hermano. Jacob presiente que esto es algo riesgoso. ¿Qué pasa si su padre descubre la mentira? Al final Jacob acepta ser parte del complot, y el resultado será doloroso para todos. Esta historia hace surgir una pregunta: ¿Puede una persona realmente desarrollar un método para lograr que Dios le conceda prosperidad, éxito y honor? A pesar de sus dudas, Jacob hizo el intento. Pero él no es el único. Nosotros también intentamos ignorar nuestra conciencia cuando pensamos que tal vez el mejor camino es tomar atajos, exagerar la verdad o socavar sutilmente a los demás. Al igual que Jacob, nuestra principal preocupación es solo obtener lo que queremos, sin importar cómo lo hagamos. Pero la Biblia nos recuerda que la bendición de una relación con Dios no se puede obtener mediante la manipulación. El honor y la prosperidad a los ojos de Dios solo pueden ser un regalo. Todos los demás esfuerzos a la postre terminan mal. Tenemos que aprender a disfrutar de su gracia permitiendo que él obre en nosotros.
Padre Celestial, ¡qué maravilloso es saber que deseas bendecirnos! Perdónanos por querer apoderarnos de tu gracia, y en cambio muéstranos cómo descansar en Cristo. En su nombre, Amén.
Jacob es uno de mis personajes favoritos de la Biblia. Pero no creo que me hubiera gustado tanto si lo hubiese conocido al principio de su vida. Era astuto, manipulador y hábil. Actuaba por interés propio y no pensaba mucho en los demás. Pero Dios lo amaba, y el libro de Génesis muestra cómo Dios persiguió y ablandó el corazón de Jacob hasta que finalmente comprendió que la bendición de Dios viene sólo por gracia. Esa verdad cambió la actitud de Jacob hacia Dios y hacia los demás. Y esa es una lección que todos necesitamos aprender. Puede que nuestros desafíos y pecados no sean los mismos que los de Jacob, pero necesitan de igual manera el poder transformador de Cristo. Todos necesitamos profundamente la seguridad de que Dios nos salvará. Y por su gracia, todos los que creen en Jesucristo, el Hijo de Dios, como Salvador, serán transformados para disfrutar de una vida plena con él para siempre.
Joel Vande Werken
Joel Vande Werken ha sido pastor desde el año 2007, sirviendo en iglesias en Sussex, Nueva Jersey, y en Whitinsville, Massachusetts. Él y su esposa, Brandie, tienen cuatro hijos pequeños.